Esta es la historia de un osito muy travieso y juguetón, al que le encanta correr por el bosque persiguiendo a los ciervos y ardillas. ¡Qué divertido! Pero había un problema, y es que el osito siempre se perdía y no podía encontrar el camino de regreso a casa.
Una vez, mientras jugaba a perseguir a un hermoso ciervo, el osito se alejó mucho de su casa y se desorientó. Buscó y buscó, pero ya no sabía hacia dónde ir. Fue entonces cuando apareció un mapache sabio y amable que lo ayudó a encontrar su camino a casa.
Desde ese día, el osito aprendió la importancia de aprender a orientarse en el bosque y a no alejarse demasiado de su hogar. Pero siempre seguía disfrutando de sus carreras locas y emocionantes con sus amigos ciervos y ardillas, bajo la mirada atenta del sabio mapache.
Así termina esta historia, recordándonos lo importante que es tener amigos sabios que nos ayuden en los momentos complicados y disfrutar de la vida con responsabilidad. ¡Nunca te pierdas en el bosque, pero tampoco dejes de disfrutar de sus encantos!